
Reto Cumplirme
Nadie nunca se arrepintió de ir a una clase de Pilates, tras finalizarla te sientes divina.
¡te cumpliste!
El Método
Este programa no es solo un calendario con casillas. Es una experiencia para cambiar tu relación contigo.
Durante 33 días (o 22, o 11), vas a entrenar un músculo que muchas veces descuidamos: la confianza en ti. Y lo vas a hacer a través del movimiento. Del pequeño acto cotidiano de cumplirte.
Cada día que lo hagas, marcarás esa casilla en tu agenda o en el descargable que recibirás. Cada día que te cumplas, sentirás ese rush de satisfacción y energía que viene cuando dices:
“Lo hice. Me elegí. Me sostuve.”
Así, con cada semana que pase, verás el mapa de tu propio compromiso. No con la perfección. Sino contigo. No se trata de hacer más. Se trata de hacer lo que puedes y hacerlo desde el amor. Este es un método para entrenar la presencia, la constancia y la autocompasión. Es una probadita de lo que podrías sostener a largo plazo. Y empieza ahora.
Pasarás de:
- Sentirte sin tiempo para ti → a encontrar momentos que te nutren.
- No saber por dónde empezar → a tener una guía clara y flexible.
- Postergar tu bienestar → a hacer de tu autocuidado una prioridad real.
- Caer en el todo o nada → a sostenerte con ternura, incluso en los días bajos.
Qué incluye el programa
Encuentros en vivo (3)
Un descargable para tu agenda
Acceso a 3 clases grabadas (movimiento, cardio y fuerza, estiramientos y movilidad)
Video de fundamentos de movimiento y alineación para clases online
Reflexiones guiadas semanales
Una clase en vivo semanal en Instagram (queda grabada)
Sugerencias de movimiento libre según tu energía
Nos acompañamos y motivamos
Habrá un grupo en WhatsApp donde estaremos compartiendo reportes, reflexiones, fotos y ánimos.
Incluso si decides moverte solo 11 días, puedes cumplirte todos los días con actos como planificar tu semana o marcar tu agenda.
Nos acompañamos, nos sostenemos, y vamos juntas.
Este reto es:
Un encuentro contigo cada día, en movimiento.
Un ejercicio de amor propio en acción.
Una forma de volver a confiar en ti a través de pequeñas decisiones sostenidas.
Un espacio donde el cuerpo guía y la mente escucha.
Una invitación suave y poderosa a moverte contigo, no contra ti.
Un entrenamiento para sostener tu motivación desde adentro..
Este reto no es:
Un programa de exigencia ni resultados sintéticos.
Una rutina impuesta o rígida.
Un espacio para la culpa, la comparación o el perfeccionismo.
Una promesa vacía de transformación rápida.
Otro intento más de empezar algo que no puedas sostener.
Una competencia contra ti misma.
Una prueba para ver si eres suficiente. (Porque ya lo eres.).
Los 3 niveles del reto
Vamos a empezar tod@s junt@s.
El reto dura 33 días.
(Pero tú eliges cuántos días vas a comprometerte a moverte dentro de ese tiempo.)
1.
11 días de movimiento
Compromiso ideal si solo puedes los fines de semana o estás empezando y no sabes bien si podrás más de eso.
2.
22 días de movimiento
Compromiso decides dedicarte solo 5 días a la semana. No tienen que ser seguidos, pero sí intencionales.
Todas empezamos el mismo día.
Todas terminamos juntas.
Lo único que cambia es tu decisión.
¿Quieres descubrir cuántos días te vas a cumplir en este Reto?
3.
33 días completos
Ideal si quieres llevarte al nivel compromiso diario. Con flexibilidad y con amor. Todas compartimos el mismo espacio, el contenido y la energía.
Este programa nació después de muchos ejercicios de autoindagación, de mirarme con honestidad y reconocer que, entre todos los hábitos saludables que deseaba integrar, había uno que se sentía como hogar: el movimiento.
Moverme ha sido mi manera de volver a mí. De escucharme. De sostenerme. Sin embargo, no lo tenía incorporado en mis hábitos sostenidamente.
Aunque el bienestar es una trama compleja—hecha de nutrición, descanso, vínculos, propósito—sentí que, para mí, el punto de partida más verdadero estaba en el cuerpo. Porque es desde ahí donde brindo, donde acompaño a otras y donde me estoy cumpliendo yo.
Este reto propone algo simple y poderoso: regalarnos el rush natural que se siente al cumplir una meta. Ese pequeño subidón de energía y alegría que nos recuerda que sí podemos, que sí estamos aquí para nosotras.
¿Y si moverte fuera un acto de amor propio, no de exigencia?
Porque es en lo cotidiano donde se transforma el carácter.
Y es en el hábito de cumplirse donde empieza el verdadero amor propio.
Y por eso lo estoy creando ahora.
Porque sé lo que es tener la intención… pero no el método.
Sé lo que es querer moverse, volver a ti, retomar rutinas —pero perderte entre el ruido, las excusas o el cansancio de sostener tantas cosas a la vez.
Este reto nace de ahí.
De la necesidad de dejar de posponerme.
Claudia Guerra.
¿Para qué este reto?
Para canalizar las ganas de dejar atrás la autoexigencia disfrazada de perfección. De las veces que me dije "ahora sí", y luego no supe cómo sostenerlo.
Cumplirme es una experiencia para reconectar con tu cuerpo y, a través de él, con tu autoconfianza.
Porque eso es lo que estamos entrenando aquí, en el fondo: La capacidad de confiar en ti. De volver a ti. De saber que puedes sostenerte… y retomar cuando haga falta.
Cuando no confiamos en nosotras, cuando el amor propio se desgasta por tanta exigencia o por tanto posponernos, se abre espacio para la duda, para las excusas, para las resistencias —todas válidas y humanas.
“Cada vez que me propongo empezar a moverme algo se atraviesa en mi camino, me fallo y no retomo”
Este reto viene a recordarte que no necesitas perfección, necesitas presencia.
¿Te suena alguna de estas?
— “Estoy en un momento crucial, esto no puede ser prioridad ahora.”
— “No tengo tiempo.”
— “Si no hago una clase completa con todo el outfit perfecto y la rutina entera… mejor no hago nada.”
— “¿Cómo voy a hacer ejercicio todos los días? No tengo tiempo para lavarme el pelo todos los días.”
Y así pasan semanas. Y meses. Y años. Y seguimos esperando el “momento ideal”.
Este reto viene a recordarte que no necesitas perfección, necesitas presencia.
No necesitas una hora diaria, necesitas elegirte cada día aunque sea por unos minutos.
No necesitas hacerlo sola, necesitas guía, estructura y comunidad.
Por eso lo diseñé para ti. Para que sientas lo que se siente cumplirte —aunque sea un poquito— cada día.
Y que esa acumulación de cumplimientos diarios se convierta en algo más grande: una relación contigo misma basada en confianza.
Porque cuando confías en ti, sabes que si paras por una razón válida —un viaje, un estudio, un descanso consciente— no estás “fracasando”.
Estás eligiendo. Y sabes que vas a volver. Sin culpa. Sin castigo. Sin empezar de cero. Porque ahora sabes sostenerte.

Si algo en ti se mueve con solo imaginarlo… es porque tu cuerpo ya sabe que esto es para ti.
Vamos a darle al cuerpo lo que pide.
From Clau